Los celos son parte de la vida. Te hace sentir horrible contigo mismo y puede hacer que hagas cosas que te hagan sentir avergonzado. Ya sabe que los niños, adolescentes y adultos pueden (y lo hacen) ponerse celosos de vez en cuando. ¿Pero pueden los bebés realmente ponerse celosos?
Seguro que pueden. Según un estudio realizado en 2008 por investigadores de la Universidad de York, los bebés pueden experimentar celos desde los 3 meses. Anteriormente, los investigadores y expertos creían que las emociones más avanzadas (como los celos) se activaron cuando el bebé era más maduro, alrededor de los dos años, pero parece que pueden comenzar a exhibir comportamientos celosos mucho antes. La profesora de psicología de la Universidad de York, Maria Legerstee, realizó el estudio en el que una investigadora se sentó con un bebé y su madre. Cuando el investigador y la madre estaban interactuando en lugar de centrarse en el bebé, el bebé se molestó visiblemente y actuó (pateando, gritando, moviéndose, etc.) para tratar de llamar la atención de las mujeres.
Piensa en lo que sucede cuando tu mejor amiga trae a su bebé a tu casa y la abrazas delante de tu bebé. A menudo, Baby se enoja porque mamá ama a otro pequeño en lugar de a él o ella. Según Today's Parent, eso es normal y natural porque su bebé lucha por su atención como un instinto de supervivencia. Pero, como Audrey Huberman, profesora de educación infantil en la Universidad de Ryerson, dijo que lo que más necesitan los bebés cuando lo hacen es la "voz, el tacto y la mirada" de sus padres. Entonces, es posible que arrullar a su bebé o sonreírle mientras su amigo la abraza puede hacer lo suficiente para eliminar esos sentimientos de pánico y celos.
Si tienes múltiples, puede ser aún más difícil. En un ensayo sobre Kveller, una madre de niñas gemelas reflexionó que las gemelas podrían estar celosas la una de la otra y mencionó que se siente horrible al tener que elegir al azar cuál salir de su cuna primero por la mañana y luego mirar a la otra. estalla en lágrimas.
Aunque sin duda es desgarrador para mamá, hay un lado positivo al ver a tu bebé ponerse nervioso porque estás prestando atención a otra persona (ya sea su otro padre, un hermano, un amigo, un primo o un extraño). Según BabyCenter, las exhibiciones externas de celos significan que padres e hijos se han unido: te reconocen a ti y a tu papel en su vida y aún no saben cómo compartir esa atención que creen que debería ser legítimamente suya.
Es difícil evitar los comportamientos celosos de raíz cuando su bebé aún es pequeño, pero a medida que crezca podrá enseñarles el concepto de compartir, así como cómo calmarse y ser más independiente. Esto significa que cuando la atención de mamá o papá se divide, ya no será el fin del mundo. Además, cuando son adolescentes, no quieren que toda su atención esté en ellos de todos modos.