Introducir nuevos alimentos a su bebé es un aspecto divertido de la crianza de los hijos. Ver la reacción inicial de su hijo a las manzanas, los plátanos y los aguacates puede ser bastante entretenido. Sin embargo, probablemente le preocupe la seguridad de estos alimentos tempranos, dada la prevalencia de alergias alimentarias. Con esto en mente, ¿puedes poner aceite de coco en la comida para bebés? Es muy probable que sea seguro, pero hay algunas precauciones a tener en cuenta.
Aunque el aceite de coco ha explotado en popularidad en los últimos años, no hay una gran cantidad de investigación sobre su seguridad para los bebés. Por lo que vale, la investigación que pude encontrar tendió a centrarse en su uso como tratamiento tópico. Según lo explicado por un estudio de 2015 en Journal of Tropical Pediatrics, se recomendaron aplicaciones de aceite de coco para mejorar la madurez de la piel de los bebés prematuros con bajo peso al nacer. Básicamente, el aceite de coco es seguro de aplicar tópicamente a este grupo particularmente vulnerable de bebés. ¿Pero qué hay de comerlo?
En general, alimentar a su bebé con aceite de coco parece ser seguro, aunque es posible que se necesite más investigación para comprender completamente sus beneficios para la salud de los bebés. Debido a que el coco es a veces un ingrediente en la fórmula infantil, esto habla de su relativa seguridad como alimento para bebés. Además, las reacciones alérgicas al coco son raras, según la Sociedad Australiana de Inmunología Clínica y Alergia (ASCIA). Según lo explicado por la ASCIA, la fórmula infantil que contiene coco supuestamente causó un caso de malestar estomacal. Lo más probable es que su pequeño pueda comer aceite de coco sin problemas, especialmente si no hay otras alergias alimentarias conocidas.
Si su hijo tiene una alergia conocida a las nueces, ¿está el aceite de coco fuera de la mesa? Desafortunadamente, no hay una respuesta simple a esa pregunta. Aunque una reacción alérgica al aceite de coco es extremadamente rara, no es imposible, según la Academia Estadounidense de Alergia, Asma e Inmunología. Debido a que las alergias alimentarias son un tema complicado, por decir lo menos, hacer que su hijo sea evaluado por un alergólogo-inmunólogo es la ruta más segura con diferencia. Con suerte, su bebé podrá disfrutar de la deliciosa delicia tropical que es el aceite de coco sin ningún problema.