Algunas personas tienen toda la suerte. Un estudio publicado a principios de este mes por la Sociedad Estadounidense de Andrología descubrió que tomar algunas bebidas a la semana puede aumentar la fertilidad masculina; en particular, la ingesta moderada de alcohol parece estar asociada positivamente a la calidad del semen. Esto contrasta con lo que se les dice a las mujeres cuando intentan quedar embarazadas, por lo que este estudio parece totalmente injusto para las madres y las mujeres. Así es la vida, supongo.
Los investigadores analizaron si la ingesta de alcohol puede afectar la función reproductiva masculina, según Science Daily. Y el estudio finalmente concluyó que el consumo moderado de alcohol está relacionado con un mayor volumen de semen y concentración de espermatozoides, así como con el recuento total de espermatozoides.
Los investigadores analizaron 323 pacientes masculinos, según el estudio publicado en Andrology. Según sus hallazgos, el 30 por ciento bebió de una a tres unidades de alcohol por semana, el 30 por ciento bebió de cuatro a siete unidades por semana, y el 30 por ciento restante bebió más de ocho unidades por semana, como informó Business Insider. En última instancia, beber de cuatro a siete unidades por semana en realidad estaba relacionado con un mayor conteo de espermatozoides además del volumen de semen.
Cabe señalar que este estudio examinó a "hombres de parejas subfértiles", tal como los describió el documento. En otras palabras, la población se limitaba a los hombres que formaban parte de parejas infértiles sometidas a TAR, también conocidas como "técnicas de reproducción asistida".
Pero aconsejar que beber con moderación probablemente no dañará demasiado tu fertilidad es muy diferente de sugerir que beber moderadamente podría mejorar tu fertilidad, que es lo que este nuevo estudio sugiere con respecto a la fertilidad masculina.
Los autores del estudio reconocieron que no podían analizar a las personas que bebían en exceso o en exceso y el impacto de eso en la fertilidad masculina, y que esos hábitos "están constantemente asociados a efectos perjudiciales en la calidad del semen". Entonces, nuevamente, la moderación parece ser la clave aquí, como con la mayoría de las cosas en la vida. Los investigadores concluyeron que todos los hombres que pasan por un proceso de reproducción asistida deberían al menos limitar el consumo de alcohol.
Si tiene dudas sobre su fertilidad o la fertilidad de sus parejas y sus hábitos de estilo de vida, como beber alcohol, lo mejor que puede hacer es consultar a su médico.