El martes, el Senado de los Estados Unidos finalmente confirmó un reemplazo para James Comey, quien fue despedido por el presidente Trump en mayo. La confirmación del senado de Christopher Wray se produce después de que Donald Trump lo nominó originalmente a través de Twitter en junio. "Voy a nominar a Christopher A. Wray, un hombre de credenciales impecables, para ser el nuevo Director del FBI", anunció Trump. "Detalles a seguir", concluyó el tweet del 7 de junio. Tan interesante como es que tanta información importante de la Casa Blanca está llegando al público estadounidense a través de Twitter, la confirmación de Wray también es bastante interesante.
Wray fue confirmado con una votación de 92-5 el martes, informa Politico, y gran parte del apoyo en torno a su confirmación tuvo que ver con su promesa de mantenerse fuera de la política. "Wray prometió repetidamente durante su proceso de confirmación que no se inclinaría ante Trump, quien, según Comey, le había pedido al entonces director del FBI una promesa de lealtad", según Politico. Sin embargo, Wray todavía es republicano y anteriormente trabajó en el Departamento de Justicia "bajo la presidencia de George W. Bush de 2003 a 2005", informa Fox News.
Entonces, ¿puede cumplir su promesa de permanecer fiel a su país y no a su partido? Queda mucho por ver.
En la audiencia de confirmación previa de Wray en julio, dijo a los senadores: "Nunca permitiré que el trabajo del FBI sea impulsado por nada más que los hechos, la ley y la búsqueda imparcial de justicia. Período". Ciertamente, Wray ha trabajado duro para llegar a donde está ahora, aunque al menos cinco demócratas permanecen escépticos de que resistirá cualquier presión de Trump que espera "lealtad", un lá James Comey.
Como informa The New York Times, después del despido de Comey, el FBI ha estado bajo el liderazgo de "Andrew G. McCabe, el director interino del FBI, a quien el presidente ha atacado repetidamente". Todavía no está claro si la confirmación de Wray dará como resultado la salida de McCabe de la oficina.
Por ahora, sin embargo, parece ser casi unánime que la confirmación de Wray no sea tan política como otras personas designadas por Trump. Con suerte, eso significa que los senadores de ambos lados del pasillo confían en su capacidad para hacer bien el trabajo de Comey. Comey estaba en medio de una investigación seria sobre una amenaza de la democracia estadounidense: para determinar si la campaña de Trump coludió con Rusia en las elecciones presidenciales de 2016. Para Comey, "no había dudas" sobre el hecho de que Rusia coludió en las elecciones.
Con suerte, Wray terminará el trabajo de Comey con integridad, honestidad y un sentido de lealtad a su país, no a su presidente.