¿Conoces la frase "La leche hace bien al cuerpo"? Bueno, parece que puede haber algo en ese dicho. Un nuevo estudio publicado esta semana ha demostrado que la leche láctea puede afectar la altura de un niño. Los niños que beben leche de vaca son un poco más altos que sus amigos que beben sustitutos de la leche.
Un estudio publicado el miércoles en el American Journal of Clinical Nutrition encontró que los niños que bebieron leche de vaca aumentaron, en promedio, aproximadamente un sexto de pulgada (o 0.4 centímetros) de altura por cada taza consumida. En otras palabras, si un niño de 3 años bebiera tres tazas de una alternativa a la leche, como leche de almendras o leche de soja, serían más de media pulgada más pequeñas que sus pares que beben leche de vaca, según muestran los hallazgos.
"No es una pequeña diferencia cuando tienes 3 años", dijo a CNN el pediatra Dr. Jonathan Maguire, autor principal del estudio. Los investigadores analizaron datos transversales de más de 5, 000 niños canadienses de 2 a 6 años de edad.
Este no es el primer estudio que analiza la correlación entre la altura y el consumo de leche de vaca. La investigación publicada en 2004 en el American Journal of Clinical Nutrition encontró que los niños que bebían una gran cantidad de leche láctea eran más altos por casi una pulgada (o 2, 5 centímetros).
Ambos estudios sugieren que la leche de vaca tiene componentes que estimulan el crecimiento que faltan en las leches de origen vegetal. La leche de leche contiene calcio, que se ha relacionado con la mejora de la salud ósea. Según la CNN, la leche de vaca también estimula mejor el factor de crecimiento similar a la insulina que los sustitutos de origen vegetal como la leche de almendras o arroz. El estudio sugiere que la diferencia de altura podría atribuirse a la disparidad en la producción de IGF.
Por supuesto, estos nuevos hallazgos no significan que los niños que beben leche de vaca sean más saludables que sus compañeros que consumen sustitutos de la leche. Según la Escuela de Salud Pública de Harvard, la leche de vaca es rica en grasas saturadas, puede causar problemas estomacales e intestinales, y se ha relacionado con un posible aumento de los riesgos de cáncer de próstata y ovario. Además, las leches de origen vegetal contienen muchos de los nutrientes vitales que se encuentran en la leche de vaca, como calcio, potasio, magnesio y proteínas.
Mi familia y yo tomamos leche de vaca (sin grasa, gracias), así que me alegra saber que hay un beneficio adicional para mi hijo. Pero a pesar de todos sus beneficios, la leche de vaca tiene sus contras, por lo que estos hallazgos no deberían influir en los padres para que abandonen o cambien sus hábitos alimenticios. Como sugiere el estudio, se necesita más investigación para comprender mejor esta conexión entre la altura y el consumo de alternativas a la leche.