Si bien es posible que haya escuchado que Ben Affleck y su ex esposa Jennifer Garner están trabajando arduamente para criar a sus hijos de la mejor manera posible, Affleck lanzó nueva información el martes que lo hará respetar al padre de tres hijos aún más. A través de una actualización de estado de Facebook el martes por la tarde, Affleck reveló que había buscado recientemente un tratamiento para la adicción al alcohol, y sus comentarios se centraron en gran medida en cómo hablar sobre ello era importante para sus hijos. Affleck señaló que era "algo que se trató en el pasado y se sigue confrontando" en el futuro.
En 2015, Affleck y Garner anunciaron su inminente divorcio, después de un matrimonio de diez años. Sin embargo, según TIME, la pareja ahora está "trabajando en su matrimonio después de pasar por un mal momento reciente que casi condujo a una separación permanente". Esta noticia, que se produjo justo un día antes de la publicación de Affleck en Facebook, apunta a un entendimiento compartido entre la pareja de que la seguridad, el apoyo y el amor de sus hijos era lo más importante para ambos. Y ahora, la revelación de Affleck de que se sometió a un tratamiento para el alcoholismo refuerza la postura de la pareja sobre la importancia de la paternidad amistosa y la crianza de sus hijos en un ambiente amoroso y un hogar estructurado.
El resto de la declaración de Affleck se hace eco de su amor por su familia, así como un fuerte mensaje de fortaleza y aliento para todos los que están pasando por dificultades similares.
Quiero vivir la vida al máximo y ser el mejor padre que pueda ser. Quiero que mis hijos sepan que no hay vergüenza en obtener ayuda cuando la necesiten, y que sean una fuente de fortaleza para cualquiera que necesite ayuda pero tenga miedo de dar el primer paso. Tengo la suerte de tener el amor de mi familia y amigos, incluida mi madre, Jen, quien me apoyó y cuidó de nuestros hijos mientras hacía el trabajo que me propuse hacer. Este fue el primero de muchos pasos que se tomaron hacia una recuperación positiva.
Los tres hijos de la pareja, Violet, de 11 años, Seraphina, de ocho, y Samuel, de cinco, obviamente tienen la suerte de tener padres tan preocupados y afectuosos en Affleck y Gardner. El sentimiento de Affleck de que nunca quiere que sus hijos se avergüencen de pedir ayuda es una declaración crucial en la sociedad actual, cuando la salud mental a veces todavía no se toma tan en serio. Afortunadamente, Affleck está en camino a la recuperación, y con Gardner y sus hijos a su lado, está claro que la familia no tiene más remedio que ir.